CONSISTORIO
Sacado del n. 10 - 2007
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Cómo cambia el Sagrado Colegio con los nuevos nombramientos
Todos los matices de la púrpura
Análisis estadístico del segundo Consistorio del pontificado de Benedicto XVI. La proporción entre el número de los cardenales y el de los fieles y de los sacerdotes en los países más representados en el Senado del Papa. No faltan las sorpresas
por Gianni Cardinale
Benedicto XVI durante el Consistorio del 24 de marzo de 2006
Al dar el anuncio el Papa había avisado que iba a derogar en una unidad el límite numérico de 120 cardenales “votantes” establecido por Pablo VI, visto que para la fecha del 24 de noviembre había 17 puestos libres entre los electores del Sagrado Colegio. Pero la muerte inesperada del cardenal japonés Stephen Fumio Hamao, de 77 años, ocurrida en Tokio el 8 de noviembre, anuló de hecho la superación prevista del límite.
De los 18 nuevos cardenales electores del nuevo Consistorio, los curiales son 7: el argentino Leonardo Sandri, de 64 años, desde el pasado junio prefecto de la Congregación para las Iglesias orientales; el estadounidense John Patrick Foley, de 72 años, desde el pasado junio pro-gran maestro de la Orden ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén; el piamontés Giovanni Lajolo, de 72 años, desde septiembre de 2006 presidente de la Comisión pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano y de la Gobernación del mismo; el alemán Paul Joseph Cordes, de 73 años, desde 1995 presidente del Consejo Pontificio «Cor Unum»; el toscano Angelo Comastri, de 64 años, desde febrero de 2005 coadjutor y desde octubre de 2006 arcipreste de la Basílica vaticana; el polaco Stanislaw Rylko, de 62 años, desde 2003 presidente del Consejo Pontificio para los laicos; el italiano de la Campania Raffaele Farina, de 74 años, salesiano, desde el pasado junio archivero y bibliotecario de la santa Iglesia romana. Mientras que son 11 los neo-cardenales residenciales: Agustín García-Gasco Vicente, de 76 años, desde 1992 arzobispo de Valencia (España); Seán Baptist Brady, de 68 años, desde 1995 coadjutor y desde 1996 arzobispo de Armagh (Irlanda); Lluís Martínez Sistach, de 70 años, desde 2004 arzobispo de Barcelona (España); André Vingt-Trois, de 65 años, desde febrero de 2005 arzobispo de París (Francia); Angelo Bagnasco, de 64 años, desde 2006 arzobispo de Génova (Italia); Théodore-Adrien Sarr, de 71 años, desde 2000 arzobispo de Dakar (Senegal); Oswald Gracias, de 63 años, desde 2006 arzobispo de Bombay (India); Francisco Robles Ortega, de 58 años, desde 2003 arzobispo de Monterrey (México); Daniel N. DiNardo, de 58 años, desde 2004 coadjutor y desde 2006 arzobispo de Galveston-Houston (EE UU); Odilo Pedro Scherer, de 58 años, desde el pasado marzo arzobispo de São Paulo (Brasil); John Njue, de 63 años, desde el pasado 6 de octubre arzobispo de Nairobi (Kenya).
Benedicto XVI decidió asimismo elevar a la dignidad cardenalicia a otros tres prelados y a dos beneméritos eclesiásticos, especialmente dignos por su compromiso al servicio de la Iglesia, con más de ochenta años: Emmanuel III Delly, de 80 años, desde 2003 patriarca de Babilonia de los caldeos; Giovanni Coppa, de 82 años, desde 1990 a 2001 nuncio apostólico en Praga; Estanislao Esteban Karlic, de 81 años, desde 1986 a 2003 arzobispo de Paraná (Argentina); el jesuita aragonés Urbano Navarrete, de 87 años, ex rector de la Pontificia Universidad Gregoriana; y el franciscano toscano Umberto Betti, de 85 años, ex rector de la Pontificia Universidad Lateranense. El Papa reveló además que habría deseado crear cardinal al anciano Ignacy Jez, de 93 años, desde 1972 a 1992 obispo de Koszalin-Kolobrzeg, en Polonia, pero que falleció el 16 de octubre, un día antes del anuncio del Consistorio.
Con la muerte de Hamao y la del cardenal salesiano venezolano Rosalio José Castillo Lara, de 85 años, ocurrida el 16 de octubre, el Sagrado Colegio sucesivo al Consistorio del 24 de noviembre resulta formado por 201 cardenales de los cuales 120 son electores. Entre estos últimos la mitad exacta (60) son europeos, 21 latinoamericanos, 16 norteamericanos, 12 asiáticos, 9 africanos, 2 procedentes de Oceanía. Por lo que respecta a los grupos nacionales el más numeroso sigue siendo el de los italianos con 21 cardenales electores (de los cuales 5 son lombardos, 4 piamonteses y 3 de la Campania); siguen los procedentes de Estados Unidos (13); los de Alemania, España y Francia (6 cada uno); los de Brasil, México y Polonia (4 cada uno) y los de Canadá, Colombia e India (3 cada uno).
«Los nuevos purpurados» dijo el Papa al anunciar el Consistorio «provienen de varias partes del mundo. En este grupo se refleja la universalidad de la Iglesia …». Sin embargo, hay quien ha señalado cierta desproporción, en algunos casos, entre el número de fieles católicos presentes en cada nación y su respectiva representación en el Sagrado Colegio. Se han subrayado, por una parte, los casos de Italia (“hasta” 21 cardenales para 56 millones de católicos), de Estados Unidos (“hasta” 13 cardenales para unos 67 millones de fieles) o de Alemania (“hasta” 6 cardenales para menos de 26 millones de católicos) y, por la otra, lo casos de Brasil (“sólo” 4 cardenales para más de 155 millones de fieles), de México (“sólo” 4 cardenales para más de 95 millones de fieles) o de Filipinas (“sólo” 2 cardenales para más de 69 millones de fieles). Dejando a un lado el aspecto histórico, que tiene su influencia en el nombramiento de los cardenales, leyendo los datos estadísticos reflejados en esta página, se puede notar que el peso específico de los países arriba citados dentro del Sagrado Colegio es quizá menos desequilibrado de lo que puede parecer a primera vista. En efecto, si se compara el número de los cardenales no con el número de los fieles sino con el de los obispos e incluso con el de los sacerdotes, resulta, por ejemplo, que la “desventaja” más que en Brasil (1 cardenal cada 4.521 sacerdotes) se da India (1 cada 7.602) o Polonia (1 cada 7.206). Así como no resulta mucha la diferencia entre España (1 cardenal cada 4.350 sacerdotes), el mismo Brasil y Filipinas (1 cada 4.093). O entre Estados Unidos (1 purpurado para 3.484 curas), Francia (1 cada 3.591) y México (1 cada 3.767). De todos modos, hay que decir que en esta clasificación especial siguen siendo “privilegiadas” Italia (1 cardenal cada 2.441 sacerdotes) y Alemania (1 cada 3.039).
Concluyendo el anuncio del nuevo Consistorio Benedicto XVI dijo también: « Habría otras personas, muy queridas por mí, que por su entrega al servicio de la Iglesia merecerían ser elevadas a la dignidad cardenalicia. Espero tener en el futuro la oportunidad de testimoniar, también de este modo, mi estima y mi afecto por ellas y por los países a los que pertenecen». Efectivamente los medios de comunicación señalaron que no se había concedido la púrpura a
Países con más de un cardenal elector
Italia 21
Estados Unidos 13
Alemania, España y Francia 6
Brasil, México y Polonia 4
Canadá, Colombia e India 3
Argentina, Filipinas, Gran Bretaña, Nigeria y Portugal 2
Países con mayor población católica
Brasil 155.628.000
México 95.525.000
Filipinas 69.308.000
EE UU 66.893.000
Italia 56.383.000
Francia 46.520.000
España 40.950.000
Colombia 40.379.000
Polonia 36.696.000
Argentina 35.408.000
R. D. del Congo 31.199.000
Alemania 25.997.000
Países con más obispos
Italia 507
Estados Unidos 438
Brasil 430
India 198
Francia 184
México 152
España 132
Canadá 132
Polonia 131
Filipinas 120
Colombia 114
Alemania 105
Países con más sacerdotes (diocesanos y religiosos)
Italia 51.262
Estados Unidos 45.292
Polonia 28.826
España 26.103
India 22.807
Francia 21.551
Alemania 18.239
Brasil 18.087
México 15.069
Canadá 8.686
Colombia 8.288
Filipinas 8.187
* Los datos están tomados del Annuarium Statisticum Ecclesiae 2005, Lev, 2007
