Católicos y Kremlin

Si las relaciones entre la Santa Sede y el Patriarcado de Moscú siguen en tensión, en las relaciones entre la Iglesia católica y la Federación Rusa se han dado señales importantes de normalización después del caso del obispo y de los cuatro sacerdotes expulsados el año pasado. En la primera mitad de julio la jerarquía de la Iglesia católica en Rusia fue informada de que, tras un papeleo burocrático de varios meses, la archidiócesis católica de la Madre de Dios, en Moscú, había sido registrada en las oficinas competentes del Ministerio de Justicia de Moscú. Dentro de pocos meses, una vez que obtengan todas las autorizaciones ministeriales previstas, las otras tres diócesis católicas en territorio ruso podrían ser registradas también. Las autoridades gubernamentales competentes han pedido a los obispos católicos que indiquen para cada diócesis el número de misioneros, sacerdotes y religiosos extranjeros, que deben ser autorizados a entrar en Rusia para sostener la actividad pastoral.

G. V.