EDITORIAL
Sacado del n. 06/07 - 2009

Editorial


Entre los trabajos a los que me he dedicado, asume un papel importante la lectura de los documentos pontificios para participar en el volumen Le encicliche sociali dei Papi


Giulio Andreotti


<I>La crucifixión</I>, Giotto, Capilla de los Scrovegni, Padua

La crucifixión, Giotto, Capilla de los Scrovegni, Padua

Entre los trabajos a los que me he dedicado, asume un papel importante la lectura de los documentos pontificios para participar en el volumen Le encicliche sociali dei Papi coordinado por Igino Giordani. Resulta evidente una clara línea de continuidad en la preocupación de salvaguardar precisamente la socialidad.
La máxima del “ay del que está solo” no puede estar en contradicción con el elogio de la soledad como “sola beatitudo”.
Por lo demás, el cristianismo nace en la colegialidad del colegio de los apóstoles, dentro del cual, sin embargo, está también la figura del traidor (Judas).
El último documento papal se titula eficazmente Caritas in veritate. Las encíclicas no son solo textos de cultura y meditación, sino que representan una concreta indicación de vida.
Jesús dijo que le reconoceremos en el amor de los propios hombres; por desgracia es una experiencia rara y combatida y no por nada el amor desinteresado se define como atributo de la divinidad. A Dios mismo se le define amor (Deus caritas est) en una síntesis de poco común e impresionante eficacia en la que se halla el resumen de toda la teología cristiana centrada en el amor.
A través de los siglos, sin embargo, la relación entre los hombres ha venido inspirándose cada vez menos en la compresión recíproca y en las convergencias, sobresaliendo por desgracia los enfrentamientos y las divisiones. Hemos de sustituir esa concepción superficial de las relaciones que tiene por regla el enfrentamiento por la conciencia del Dios-Amor que resume eficazmente todo el Nuevo Testamento.
El humanismo cristiano está sin lugar a dudas en las antípodas de la realidad conflictiva propia de la filosofía del homo homini lupus, que por desgracia sigue caracterizando en gran medida a los hombres.
Amor y muerte. Desde el Calvario Jesús nos enseña.


Italiano English Français Deutsch Português chiesa"> » per i monasteri
di clausura


» per le missioni

» per i seminaristi
-->