Ofrecemos la conclusión de la homilía de la misa de Nochebuena celebrada por el papa Benedicto XVI: «En el establo de Belén el cielo y la tierra se tocan. El cielo vino a la tierra. Por eso, de allí se difunde una luz para todos los tiempos; por eso, de allí brota la alegría y nace el canto. Al final de nuestra meditación navideña quisiera citar unas palabras extraordinarias de san Agustín. Interpretando la invocación de la oración del Señor: “Padre nuestro que estás en los cielos”, se pregunta: ¿qué es eso del cielo? Y ¿dónde está el cielo? Y da una respuesta sorprendente: “Que estás en los cielos” significa: en los santos y en los justos. Los cielos físicos son ciertamente los cuerpos más excelentes del mundo, pero, no obstante, son cuerpos, y no pueden ellos existir sino en algún espacio; mas, si uno se imagina que el lugar de Dios está en los cielos, como en regiones superiores del mundo, podrá decirse que las aves son de mejor condición que nosotros, porque viven más próximas a Dios. Por otra parte, no está escrito que Dios está cerca de los hombres elevados, o sea de aquellos que habitan en los montes, sino que fue escrito en el Salmo: ‘El Señor está cerca de los que tienen el corazón atribulado’ (Sal 34 [33], 19), y la tribulación propiamente pertenece a la humildad. Mas así como el pecador fue llamado ‘tierra’, así, por el contrario, el justo puede llamarse ‘cielo’” (Serm. in monte II 5,17). El cielo no pertenece a la geografía del espacio, sino a la geografía del corazón. Y el corazón de Dios, en la Noche santa, ha descendido hasta un establo: la humildad de Dios es el cielo. Y si salimos al encuentro de esta humildad, entonces tocamos el cielo. Entonces, se renueva también la tierra. Con la humildad de los pastores, pongámonos en camino, en esta Noche santa, hacia el Niño en el establo. Toquemos la humildad de Dios, el corazón de Dios. Entonces su alegría nos alcanzará y hará más luminoso el mundo. Amén»».

Con motivo de la Navidad, Manuel Musalam, el único párroco católico presente en Gaza, y Yamal N. El Judary, exponente político de la Franja de Gaza y coordinador del Comité popular contra el asedio, enviaron un llamamiento al papa Benedicto XVI para que intervenga respecto a la dramática situación en que vive la Franja de Gaza tras el cierre de las fronteras llevado a cabo por el Estado de Israel. Publicamos parte del llamamiento: «Este ilegítimo asedio ha traído consecuencias graves, mientras que se cometen continuamente evidentes violaciones de las leyes sobre los derechos humanos. ¡No le está permitido a la gente conseguir medicinas o viajar al extranjero para curarse! Los instrumentos médicos más básicos están fuera de uso y los israelíes prohíben la entrada en Gaza de las piezas de recambio, causando complicaciones aún más graves para los enfermos. Hasta hoy han muerto 51 pacientes debido al cierre ordenado por Israel y a la penuria de medicinas que es su consecuencia inevitable. A lo que hay que añadir que más de 1.500 personas corren el peligro de una muerte segura por el mismo motivo y otros pacientes del empeoramiento de su salud, incluidas personas que padecen enfermedades crónicas, recién nacidos y ancianos.
Por si no fuera suficiente, los proyectos para las infraestructuras, para la construcción y para el desarrollo han sido congelados. Todas las materias primas necesarias para estos proyectos no pueden entrar en la Franja de Gaza. Además, han cerrado más de 3.900 pequeñas empresas, causando la pérdida del trabajo a 140.000 personas. Las estadísticas sobre la pobreza tocan niveles nunca vistos, y cada vez más personas viven en la miseria, con una renta por debajo del umbral de la pobreza. Todo esto conlleva una crisis humanitaria cada vez peor.
Por tanto, hacemos un llamamiento a Su Santidad para que pueda escucharnos y pueda aliviar nuestro dolor, nuestro sufrimiento y las aflicciones causadas por la ocupación. Recurrimos a usted para que intervenga con sus predicaciones capaces de tocar los corazones y las conciencias de la gente, para pedir el fin de este asedio. El asedio es una violación patente de las leyes sobre los derechos humanos, de las convenciones de Ginebra y de toda carta internacional sobre los derechos humanos».

NAVIDAD/1
El presidente iraní Ahmadineyad escribe al Papa

«Por sorpresa, entre los muchos mensajes navideños enviados a Benedicto XVI, llegó uno del presidente Ahmadineyad. El líder iraní desea que 2008 traiga a la comunidad internacional paz y tranquilidad basadas en la “justicia y la espiritualidad” y hace votos para que se eliminen la opresión y las discriminaciones en el respeto de los derechos de los pueblos. El mensaje recuerda que Jesucristo es para los musulmanes uno de los profetas más importantes. “El mundo actual” concluye Ahmadineyad “necesita seguir los preceptos de los profetas divinos más que en cualquier otro momento de la historia”». Refería Marco Politi en el diario la Repubblica del 27 de diciembre.


NAVIDAD/2
El Niño Jesús y Papá Noel

«Si estuviera en mis manos, prohibiría por ley –como ofensa a la pietas de una tradición que durante generaciones ha hecho sentir a la infancia lo cerca que están y lo intercambiables que son lo sagrado, lo fabuloso y lo familiar– la imagen y el mismo vocablo de Papá Noel. Hasta la secularización tiene un límite de decencia. Transformar el misterio de la encarnación –el eterno que se hace historia, tiempo fugaz, carne frágil y perecedera– o incluso la infantil poesía del Niño Jesús o del ángel que lleva los regalos en la figura de un viejo barrigudo y vano, de cara rubicunda y alegremente cretino, es demasiado». Decía Claudio Magris en un editorial del Corriere della Sera del 24 de diciembre.


MUNDO/1
Hu Yintao y la ayuda a los creyentes en dificultad

«Quizás es sólo una tímida y parcial señal de apertura, pero lo que sucedió el miércoles en Pekín es como poco una novedad. Por primera vez en su historia, el Politburó dedicó una reunión a la religión e invitó a dos expertos para que hablaran de la historia y de la situación de la religión en China.
Fue el mismo presidente chino Hu Yintao –en una reunión de la oficina política del Partido comunista chino– quien subrayó que Pekín sostiene “la libertad de religión” y que se propone “ayudar a los creyentes de todas las religiones que se encuentren en dificultad”». Es el comienzo de un artículo publicado por Avvenire el 21 de diciembre.


MUNDO/2
Walesa y la frontera entre Polonia y Rusia

El 21 de diciembre nueve países, casi todos del Este europeo, entraron en la llamada “área Shengen”, que prevé la abolición de los controles sistemáticos en las fronteras de los Estados miembros (y otras cuestiones). Uno de estos Estados es Polonia. Entrevistado sobre el acontecimiento, el antiguo líder de Solidaridad, Lech Walesa, declaró: «Para nosotros es una alegría y un compromiso. Y también un problema mental. Nuestra frontera oriental se convierte hoy en la frontera de toda la Unión y debemos ocuparnos de mantener de los estándares. Esto lo prometemos. No podemos y no queremos, sin embargo, prometer que esta frontera se convierta en un “telón de cristal” cada vez más alto y mejor guardado. Nuestro propósito es que se disuelva, de modo responsable y planificado, porque una situación en la que se reforzaran las alambradas contra nuestros vecinos sería para nosotros, nación que durante años ha luchado por la libertad, especialmente incómoda». La entrevista fue publicada en la Repubblica del 22 de diciembre.


DIPLOMACIA
Nombrados nuevos nuncios en Australia y Zimbabue

El 22 de diciembre el Papa nombró nuncio apostólico en Australia al arzobispo Giuseppe Lazzarotto, de 65 años, véneto, desde 2000 representante pontificio en Irlanda y anteriormente (desde 1994) nuncio apostólico en Jordania e Irak.
El mismo día 22 de diciembre el Papa nombró nuncio apostólico en Zimbabue al arzobispo George Kocherry, de 62 años, indio, desde 2000 representante pontificio en Ghana.